LAS PRIMARIAS. UN RECORRIDO POR EL PROCESO

        Las elecciones primarias en el PSOE de Andalucía para designar a su candidato a la Junta es un proceso usual en el PSOE, recuperado en 1997, siempre que haya más de un candidato, a las elecciones del ámbito que sea. Son convocadas, a petición de la Ejecutiva andaluza, ante el anuncio de la Ejecutiva Federal de su convocatoria, y del deseo expresado por varias ejecutivas provinciales.

        Es una práctica que desde la II República, (con un largo paréntesis sin efectuarlas como vemos), da voz y voto a los militantes y sus resultados son una incógnita, porque no siempre coinciden los deseos de los aparatos del partido, con los de aquellos, (los militantes) Y hablamos de aparatos, en plural, porque en esta ocasión, y por el ámbito en que se dilucidan estas primarias, hay candidatos de las dos ejecutivas,.., aunque se niegue.

        El episodio más llamativo de ese desencuentro entre ejecutiva y militantes se sustanció con la victoria de Josep Borrell en su pugna con el entonces Secretario Gral. de la Ejecutiva Federal Joaquín Almunia en las Primarias para las elecciones Generales, en abril de 1998. Y no menos importante y reciente es el caso de primarias para las últimas Elecciones Generales en las que salió elegido el actual Presidente del Gobierno. 

        Antes, el proceso que enfrentó el 3 de octubre de 2010  al líder del Partido en Madrid, Tomás Gómez, que no era el favorito de Ferraz, y la entonces ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, que se resolvió a favor del primero;  y en el plano municipal  Jordi Hereu, Alcalde entonces de Barcelona, que el 19 de febrero de 2011 se midió con Montserrat Tura, que era la candidata oficial y también ganó.

        Desde su fundación hasta el inicio de la guerra civil se utilizó este sistema de primarias, el voto directo de los militantes para la elección de candidatos tanto a puestos de estructura del partido como a cualquier proceso electoral. Después, y hasta el 34 Congreso de 1997, que lo recuperó como respuesta innovadora y de apertura democrática del PSOE, se empleó el de listas cerradas y no bloqueadas.

        Un año después se celebraron las primeras elecciones en el ámbito de una Comunidad, primarias en el País Vasco: fue en marzo de 1998, resultó vencedor Nicolás Redondo, hijo, como candidato a lehendakari sobre la aspirante Rosa Díez.

        Se repitió el mismo proceso de primarias para la elección de candidatos a las autonómicas y municipales en todo el Estado, (aparte de los anteriormente comentados de 2011 en la Comunidad de Madrid y Barcelona), de 1999 y de 2003, en los ámbitos en que hubo mas de un aspirante, y en estas ocasiones, en la mayoría, con la victoria de los candidatos oficiales de las correspondientes ejecutivas. 

        Pero empecemos a hablar del proceso inmediato en Andalucía. Para presentarse a las primarias hay que obtener un número determinado de avales, (firmas de los militantes) Y hasta hoy han expresado su voluntad de presentarse cuatro candidatos que tendrán que conseguir esos avales; la votación tendrá lugar a mediados de junio. La idea es que antes del verano y, ante un eventual adelanto electoral, en Andalucía haya una alternativa preparada.

        Lo seguiremos de cerca, y participaremos en el proceso.

RELATIVIDAD Y AUTOESTIMA EN POSITIVO

La teoría de la relatividad de Einstein, al igual que el perspectivismo de Ortega, pueden aportar mucho a la realidad de la vida social y política de estos momentos, ya se hable de Madrid o de España; de Cataluña, España y Europa; del Oriente Medio y el conflicto histórico entre Palestina y la descendencia de Abraham; o ya se hable del coronavirus y la pandemia en Oriente y Occidente o en la misma Europa del Sur y del Norte.

Hablando de Madrid, podemos observar que se han acentuado aportaiones contradictorias de datos y peleas políticas al uso. Lo mismo ocurre si se centrara la cuestión en la pandemia fruto del dichoso coronavirus, ya sea en Brasilia, en Madrid o en Berlín. Pero… ¿Por qué relacionar la relatividad de los hechos o el perspectivismo con el tema de la autoestima?

Según podemos ver en el libro de Luis Rojas Marco: La autoestima. Nuestra fuerza secreta, el escenario del “yo”, la fascinación con uno mismo, y los retos a los que nos enfrentamos a lo largo de la vida son condicionantes de la visión de la realidad propia y ajena, personal y social.

Las personas engreídas, arrogantes y prepotentes tienden a utilizar los medios sociales, económicos o físicos, y también los políticos, para subyugar y dominar… Por eso, quizás, se nos aconseja distinguir entre la autoestima saludable o constructiva y la autoestima narcisista o destructiva. Además, conviene tomar conciencia y tener en cuenta que una es la cultura individualista –del “ser sí mismo”- y otra la cultura “comunitarista” o solidaria –en la que el “nosotros” da sentido al “ser con los demás”-.

De hecho, a finales del siglo pasado, se pensaba que el impulsar la valoración positiva de sí mismo llevaría previsiblemente a la disminución de ciertas lacras sociales como el crimen violento, el maltrato doméstico, el abuso del alcohol y las drogas… o el fracaso escolar. Pero, posteriormente, se ha ido comprobando que no es necesariamente la baja autoestima ni causa principal ni secundaria de los malos sociales que conocemos como tales; y que las personas con una autoestima saludable, que son mayoritarias en la sociedad, tienden a pasar inadvertidas.

El problema principal son los efectos negativos y las consecuencias devastadoras de la autoestima dañada en este tipo de sociedad actual donde la importancia del “yo” supera con mucho a la del “nosotros”.

Importante, pues, el regalo de Einstein que nos transmite el sentido de la relatividad, que podemos aplicar a la vida desde el campo de la física cuántica. Y lo mismo podemos decir del denominado “perspectivismo” de Ortega y Gasset –que nos invita existencialmente a ser personas conscientes frente a circunstancias adversas-. Ser conscientes de la subjetividad de nuestras percepciones y apreciaciones, ser conscientes de la relatividad o de la parcialidad, es un paso importante previo al análisis de la realidad, siempre compleja, dinámica y abierta.

Los seres humanos no estamos llamados, conscientemente, a hacer lo que nos venga en gana. Eso no es libertad. Nuestra vida en libertad es vida en comunidad –donde hay que conjugar igualdad, libertad y solidaridad-. Hay ahí todo un problema de fondo de Educación y de Cultura.

La autoestima en positivo, de forma moderada, y siendo conscientes de la relatividad del “yo”, nos invita a construir con sentido del “nosotros” favoreciendo un cambio ideológico solidario y comprometido, así como a participar en cuanto pueda mejorar el Bien Común o el Interés General (por encima del individualismo), ya sea en la propia sociedad, ya sea en el seno de nuestra propia opción como grupo socio-político, ya sea en el seno de la Casa Común, que es la Tierra, y que nos demanda también una nueva sensibilidad ecológica y de respeto.

Relatividad, pues, respecto a cuanto podemos percibir personalmente y que ocurre en estos momentos, y autoestima en positivo frente a cualquier tendencia negativista y destructiva, o frente a egocentrismos insolidarios, ya sean de personas, pueblos, naciones y Estados.

PATENTES Y VACUNAS

Algunos miembros de Senatus Trianae lo somos también de Médicos Sin Fronteras (MSF) ya saben, esa Organización de sanitarios altruistas que se van a Haití para ayudar en un terremoto, se desplazan a Siria en plena guerra para montar hospitales de campaña y atender a los millones de refugiados o se establecen en Mali donde la población sufre los ataques de fanáticos islamistas. A veces, sus actividades en estos paises, les cuestan la vida.

Pues bien, en el último informe de MSF se afirma lo siguiente:

«La Covid-19 es una amenaza para la salud global y acabar con ella requiere medidas extraordinarias. Entendemos la importancia de la propiedad intelectual pero para luchar eficazmente contra la pandemia, necesitamos aumentar la producción de vacunas de forma drástica, para lleguen no solo a los paises ricos, sino también el resto de paises del planeta, allí donde vive la mayoría de la población mundial. Las patentes de las empresas farmacéuticas, que protegen sus beneficios económicos, están frenendo la fabricación de vacunas. Pero la lucha contra la Covid-19 no puede ser un negocio»

El texto es esclarecedor y pone el dedo en la llaga; La salud es un derecho inalienable de todas las personas que conforman la humanidad y no puede estar sometida a los vaivenes de la especulación en bolsa y, en definitiva, al negocio.

Por otra parte 100 paises con La India y Sudáfrica a la cabeza han pedido la suspensión, siquiera sea temporal, de la patentes quue pesan sobre las vacunas a fin de fabricarlas de manera masiva y proteger a sus poblaciones.

El caso de La India es paradigmático. Se trata de un país productor mundial de vacunas y fármacos de todo tipo, pero no tiene viales para vacunar a su propia población, que solo está inmunizada en un 2%. Allí se producen 400.000 contagios y 4.000 muertes diarias y no hay oxígeno para todos los que lo necesitan, ni madera para incinerar a los cadáveres.

Naturalmente, el gobierno de La India tiene una gran resposabilidad sobre lo que allí está ocurriendo. Como la tiene el de Brasil en su bello país y, en general, todos los gobiernos del mundo que han optado por defender los derechos y beneficios de las compañias farmacéuticas por encima de la salud y la vida de sus poblaciones.

En medio de un enconado debate mundial a favor y en contra de liberalizar las patentes de las vacunas contra la Covid-19, el gobierno de EEUU, ha afirmado que acepta suspender temporalmente las patentes contra el coronavirus. Inmediatamente, nuestra querida Úrsula von der Leyen ha precisado que ella también se lo está pensando. ¿Tendremos ulguna vez una política europea digna de tal nombre y sobre todo autónoma? ¿Será que, sencillamente, esta Sra. ha sentido vergüenza? Esto último sería un avance sobre posiciones anteriores.

Asi pues, «De un apartado rincon de Madrid» (Luisa Fernanda) se recorta en educación y sanidad mientras se bajan los impuestos practicando una política ultra-liberal en la mejor tradición trumpista, y a la vez, en EEUU en país que resume la expresión más acabada del sistema capitalista, Joe Biden proyecta subir los impuestos a los más ricos para financiar programas sociales y apoya la exención de la propiedad intelectual para las vacunas del Covid-19.

HAY QUE LIBERALIZAR LAS PATENTES DE LAS VACUNAS


La premisa de partida es que la pandemia que padecemos tiene, como su propio nombre indica, un alcance global y, por tanto, afecta a todo nuestro planeta. No resulta imaginable una situación más peligrosa, extensa y excepcional que ésta. Su solución tiene que venir de la mano de medidas también excepcionales. Hasta que todos los seres humanos no estén inmunizados, nadie estará completamente seguro porque el virus mutará y mientras se mantenga un foco activo estaremos en peligro. Aquí, pues, no caben soluciones insolidarias y localistas.

Recordamos las palabras a la Convención de George Dantón en pro de la abolición de la esclavitud: “Vuestra libertad es mentira si no la extendéis a todos los hombres”. Parafraseándolo podríamos decir: Vuestra inmunidad es precaria si no la hacéis extensiva a todos los países del mundo.

El actual problema de producción y distribución de las vacunas es absolutamente artificial y evitable y sólo responde a la perversa lógica capitalista que dicta el monopolio exclusivo de unas patentes, es decir, unos derechos de invención, explotación y lucro, según los cuales unos laboratorios privados ( cuyas investigaciones son a menudo financiadas con dinero público) deben obtener unos beneficios desorbitados, lo que en lenguaje coloquial es como decir hasta que el oro les salga por las orejas a sus accionistas. Para que esta locura prosiga en el tiempo y rinda pingües beneficios se hace necesario que muchos millones de seres humanos, todavía no sabemos cuántos, pierdan la vida. Es la misma lógica que encarece y hace escasear los alimentos mientras hay desnutrición infantil y adulta o la que propicia la búsqueda de fármacos estimulantes a 60 euros el envase de tres pastillas, para que algunos viejos ricos tengan sus penúltimas erecciones, mientras faltan vacunas y tratamientos para niños africanos que mueren de enfermedades perfectamente curables.

Además, se está haciendo política, en el peor sentido de la palabra, con las vacunas. Todos. Desde la UE con su lentitud, torpeza y negativa a adquirir vacunas fuera del ámbito norteamericano y europeo, con independencia de la calidad de las mismas, hasta Rusia con su imperialismo vacunal para extender sus áreas de influencia en América del Sur, África e incluso Europa; Serbia, Hungría, Chequia y ahora Austria y parece que Alemania. Ahora bien, Rusia sólo ha vacunado un 3% de su propia población y los rusos no confían en la Sputnik V.+

China también especula con Sinovac y Sinopharm aunque en este caso parece que sí esta inmunizando a su población a la vez que extiende su influencia por amplias zonas de África, Asia y América del Sur

Si se liberalizaran las patentes, siquiera temporalmente, se podrían fabricar todas estas vacunas y las que quedan por salir, en todos los países del mundo e inmunizar a toda la población en un tiempo record, lo que salvaría millones de vidas y estimularía la economía de manera inmediata. Esto es lo que han pedido 100 países subdesarrollados y a eso se han negado la UE, EEUU, Rusia China etc., etc., … Todo ello en contra de los intereses, la salud y la vida de sus propias poblaciones con una miopía política difícil de avaluar y cuando, con respecto a Europa, el Tratado de la Unión autoriza, en casos excepcionales, suspender y expropiar las patentes si con ello se preserva el bien de la población. ¿Cabe algún caso más justificado que este?

¿Para qué sirve la Unión Europea? ¿A qué intereses responden estos mandatarios europeos? ¿Qué tipo de autoridades son estas que anteponen los beneficios de unos cuantos laboratorios a la vida de sus conciudadanos? ¿A quién pretenden engañar? Van a terminar en el basurero de la historia.

¿Por qué España, que no tiene un gobierno social-comunista como dice la derecha, pero tiene socialistas y comunistas en su seno, suscribe estas políticas reaccionarias? ¿ No se debate la cuestión de las patentes de vacunas en el seno del Consejo de Ministros y Ministras del gobierno de coalición? Muchas preguntas sin respuesta y alguna respuesta que tememos formular.

Terminemos, no obstante, con una nota positiva.

La OMS por medio del programa COVAX pretende vacunar a 2.000.000.000 de personas de países pobres sin acceso a las vacunas disponibles, esperemos que lo consiga y se imponga el bien público, la solidaridad y la seguridad de todos los seres humanos de esta Casa Común, que es la Tierra, donde debe conjugarse igualdad y libertad para toda persona humana.